por SHARLEE TRUJEQUE.
Tras obtener un triunfo en el conteo de votos de las últimas elecciones para cargos administrativos en la Asociación Nacional de Actores, Felipe Nájera se mostró feliz y comprometido en su próximo trabajo dentro de la Secretaria de Trabajo y Conflictos.
El actor ha expresado su deseo de cumplir nuevas metas que apoyen al gremio actoral y asumirá su cargo el próximo sábado 5 de abril:
«Ahora viene la verdadera labor, el día a día, de conseguir más y mejores contratos colectivos para el gremio: ahora viene el cabildeo y todo ese trabajo que no se ve, pero que hay que hacer para dar los resultados que esperan mis compañeros, los que votaron y los que no, porque trabajaré para todos, no para un solo grupo».
«Eran banderas de campaña, y metas por las que seguiré luchando, pero no sera lo único que me mueva: hay tanto por hacer dentro de la ANDA, que eso es apenas la punta del Iceberg que debe haber».
«Sé a lo que me voy a enfrentar y quiero hacerlo: seguir moviendo las cosas, formar un equipo renovador de la ANDA, pondré todo mi corazón y lo que he aprendido al servicio de los compañeros, sin dejar de ser lo que soy como actor ni como ser humano».
«Quiero agradecer a los medios de comunicación que tanto se involucraron en conocer, acercarse a la ANDA, en saber y conocer la problemática de un gremio como el nuestro; para ellos, les digo que siempre mi oficina sera de puestas abiertas para cualquier tema que deseen saber y apoyar o cuestionar. GRACIAS.»
Felipe Nájera asegura que, además de impulsar nuevas reformas y cambios (como aquellos por los que el actor ha luchado de manera individual desde hace 4 años, abogando para que las parejas del mismo sexo tuvieran los mismos derechos sindicales), y que una de sus metas es hacer una «ANDA más atractiva para todos, que no sea una asociación que solo quite, sino que también dé y a todos».
Esperemos que el actor Felipe Nájera logre esos ideales de cambio y prosperidad, en una asociación donde la corrupción, la falta de apoyo y el egoismo, forman parte del día a día.
¡Zas!