por SHARLEE TRUJEQUE.
Al parecer existen problemas en el paraíso de «La Voz México», de acuerdo al portal de tvnotas.com que afirma que Ricky Martin está furioso con la producción de dicho reality, donde los tacha de poco profesionales.
Según la publicación, los 4 coaches de «La Voz México» llegaron puntuales a las 8 a.m. a su llamado en Televisa San Ángel, donde debían estar maquillados, peinados y super arreglados porque la grabación comenzaría a las 9 a.m. Se dice que las horas pasaban y la producción tuvo un retraso de 7 horas (ya que comenzaron a trabajar a las 3 p.m. y terminaron a las 9 p.m), lo que sacó de onda a los 4 artistas encargados de elegir las voces en el casting. Supuestamente Laura Pausini, Yuri y Julión Álvarez comprendieron que siempre hay problemas en el primer día de grabación…excepto Ricky Martin.
Un testigo dijo que el cantante Boricua despotricó en contra de la producción, diciendo que era una falta de respeto y que ese tipo de cosas nunca le habían ocurrido, ya que en otros lugares «sí son profesionales» y nunca juegan con su tiempo; afirman que Ricky Martin tuvo una actitud «pesada» con gritos, y que desde su camerino llamó a sus representantes, los cuales al finalizar la jornada discutieron con el productor Miguel Ángel Fox.
Suponemos que es inevitable que Ricky pueda comparar la manera de trabajar de la producción Mexicana, ya que el cantante formó parte de «The Voice Australia» por dos temporadas.
Ricky Martin puso condiciones para formar parte del proyecto en México, las cuales en su mayoría le han consentido ya que es un artista internacional; el cantante cuenta con 2 escoltas que lo protegen e incluso sus hijos Matteo y Valentino cuentan con guardaespaldas que los acompañan a todos lados. También mencionan que pidió botellas con agua de marca extranjera (las cuales no pudieron darle, ya que la producción eligió una marca nacional), un camerino acondicionado como si fuera su casa (con baño, cocina y jardín para que sus hijos pudieran jugar ahí), además de que debía tener un pasillo cerrado desde el set hasta el camerino para que nadie lo pudiera ver, y también pidió grandes espejos.
Al principio se afirmaba que Ricky Martin se manejaba de una manera amable y que los «pesados» eran los miembros de su equipo, que solo hablaban en inglés a pesar de ser centroamericanos.
Total que en todos lados se cuecen habas, y honestamente a Ricky Martin le perdonamos absolutamente todo…quizá tuvo 5 minutos de carácter como todos llegamos a tener, y sabemos que su trabajo no desmerecerá simplemente por un problema ajeno a sus manos.
¡Go, Ricky Papirriqui, Go!
¡Zas!